El diagnóstico es el resultado del proceso de recogida de datos que permiten al profesional conocer cuáles son las dificultades específicas que presenta el educando y cómo éstas están afectando a nivel emocional, escolar y familiar.
El uso de herramientas de recogida de información como: entrevista (alumno-familia-tutor/a), batería de tests, dinámicas de juego y observación directa, nos permiten conocer en profundidad a la persona y proponer un plan de intervención adaptado a las necesidades específicas.
El tratamiento psicopedagógico tiene como objetivo la reeducación de aquellas capacidades en las que se ha detectado algún tipo de déficit o trastorno.
Lenguaje escrito: Entre otros trastornos relacionados con los procesos de aprendizaje de la lectoescritura trabajamos la reeducación de: dislexia, disortografía, disgrafía y lateralidad cruzada.
Lenguaje oral: Reeducación de las dificultades en la comprensión y el uso del lenguaje, que se ve reflejada en una utilización deficitaria del vocabulario y la utilización incorrecta de la construcción de frases.
Estimulación cognitiva: Entrenamiento de los procesos cognitivos básicos como: atención, memoria, orientación viso-espacial, percepción, razonamiento lógico abstracto y matemático que intervienen directamente en el rendimiento académico.
Modificación de la conducta: Tratamiento cognitivo-conductual dirigido a niños/as y jóvenes con Trastorno por Déficit de Atención e Hiperactividad (TDAH)
Educación emocional: Tratamiento terapéutico que se centra en facilitar un autoconocimiento que permita al educando reforzar su autoestima y percibir las dificultades como retos que puede conseguir apoyándose en los valores del esfuerzo y la constancia.